Las autoridades japonesas han anunciado oficialmente que aprobarán pedido de 63 F35A adicionales, así como 42 F35B, versión con despegues y aterrizajes cortos y verticales del avión Lockheed. Los F35A se unirán a los 42 aviones ya encargados, para reemplazar alrededor de un centenar de F15J envejecidos. Los F35B estarán destinados a ser desplegados en los dos portaaviones de la clase Izumo, que serán modificados para este fin.
Esta decisión se tomó, según las autoridades japonesas, para responder al refuerzo de la flota china de alta mar, cuyo segundo portaaviones está en prueba y el tercero en construcción. También es una forma, según ellos, de reequilibrar la balanza comercial con Estados Unidos, que según el presidente Trump tiene demasiado superávit.