Una vez más, los ejércitos e industriales rusos utilizaron la experiencia siria para mejorar la eficacia de combate de las fuerzas y los equipos. El helicóptero MI-28M se desplegó varias veces en el teatro de operaciones sirio y llevó en configuración estándar el misil antitanque 9M120 Ataka-B, un misil controlado por radio con un alcance de 10 km. Sin embargo, los helicópteros están muy expuestos a misiles antiaéreos y sistemas de artillería durante la implementación de estos misiles, requiriendo una línea de visión, y cuyo alcance reducido los coloca a distancia para estos sistemas.
Es por eso que el MI-28 se someterá a un cambio de imagen, para ser llevado al estándar NM, con nueva optrónica, blindaje reforzado, detectores de incendios y motores más potentes. Sobre todo, el nuevo helicóptero estará equipado con un nuevo misil antitanque, identificado por el momento por el código “artículo 305”.
Este nuevo misil, según la información recogida, tendrá un alcance máximo ampliado a 25 km y un buscador de infrarrojos con hombre en el bucle, como las funcionalidades que ofrece el misil francés MMP de MBDA.
Con este nuevo sistema, el MI-28NM podrá aprovechar objetivos blindados a una distancia segura de los sistemas SHORAD actuales y de los que se están diseñando en Occidente, y podrá utilizar el enmascaramiento del terreno para protegerse de superficies de largo alcance. -misiles al aire. Como suele ocurrir en Rusia, se trata de una solución simple y pragmática para mantener una ventaja táctica, incluso temporal.
Basándose en arreglos anteriores realizados en el equipo desplegado en Siria, es razonable estimar que el nuevo helicóptero y su nuevo misil entrarán en servicio dentro de 3 o 4 años, lo que convertirá al Mi-28NM en un sistema formidable contra vehículos blindados, particularmente occidentales. en su caso, durante varios años.
La capacidad de respuesta y el voluntarismo demostrados por los industriales y los militares en Rusia para mejorar su desempeño operativo en plazos cortos son tan admirables como preocupantes para nosotros, los occidentales, expuestos como estamos a plazos mucho más largos.