Según el sitio Noticias navalesSegún un sitio griego, las autoridades griegas enviaron a Francia una carta de intención relativa a la adquisición de 2 fragatas Belh@rra optimizadas para la defensa antiaérea para la Armada helénica. Las negociaciones sobre este tema, que se llevan a cabo desde hace muchos meses en Atenas, parecen haber zanjado todos los detalles de configuración, equipamiento, plazos y formación de la tripulación, a excepción del punto crucial de la financiación.
De hecho, para poder lanzar la adquisición, las autoridades griegas deben obtener una financiación de más de 1 millones de euros, con el fin de suavizar la adquisición sobre su presupuesto de equipamiento de defensa de 600 millones de euros al año, ya significativamente reducido por la modernización de sus F16. . Por lo tanto, las negociaciones parecen centrarse ahora en este punto crucial: Grecia pide a Francia que encuentre una solución para poder activar la orden.
Hay que decir que la Armada griega necesita urgentemente estos buques polivalentes, cuyo formato se adapta perfectamente a sus necesidades y que son especialmente eficaces en las zonas clave de la defensa antiaérea con sus Aster 16 de 32 a 30 misiles y su radar Thales, AESA SeaFire, y en guerra antisubmarina, con equipos de detección entre los más eficientes del planeta. De hecho, si son adquiridos, el Belh@rra griego tendrá que controlar rápidamente el poder naval y especialmente aéreo turco, con casi 350 aviones, incluidos 250 F16, mientras Ankara tiene reivindicaciones territoriales cada vez más apremiantes en el Mar Egeo y el Mediterráneo Oriental.
Como ocurrió con la financiación solicitada por Egipto respaldada por la compra de Rafale Además, la financiación de esta petición griega no debería, de hecho, plantear un problema para Francia. De hecho, los Belh@rra, al menos en su configuración francesa, sólo se componen de unos pocos sistemas importados. Por lo tanto, si los edificios fueran efectivamente construidos en Lorient por el Grupo Naval, el rendimiento presupuestario registrado por el Estado superaría el 75%, sin tener en cuenta las compensaciones vinculadas al empleo. Por tanto, la asunción de riesgos sería extremadamente limitada para el Estado: una garantía de pago del 25 % sería suficiente para cubrir todo el riesgo efectivo. Además, tras los éxitos de 2018 con el programa “CaMo” en Bélgica, los NH90 en España, y en 2019, el notable contrato para el diseño y construcción de 12 buques de guerra contra minas de nueva generación para las armadas belga y holandesa, un nuevo contrato con Grecia marcaría una dinámica fundamental en Europa en materia de adquisición de material de defensa francés, después de casi dos décadas de escasez. Recordemos también que Grecia ha manifestado su interés en adquirir dos fragatas ligeras furtivas de la Armada francesa que Francia podría poner próximamente en el mercado.
El intenso lobby estadounidense sobre esta cuestión, muy hostil a la oferta francesa, con una oferta basada en las fragatas Adelaide de segunda mano potencialmente adquiridas en Australia, respaldada por la adquisición de misiles Standard SM2 y Harpoon de los Estados Unidos, explica sin duda la discrecionalidad. del Grupo Naval en esta materia, en un país donde los temas de Defensa tienen un peso político muy importante.
¡Esperemos, por tanto, que pronto un anuncio de los gobiernos francés y griego firme un nuevo período de colaboración entre los dos países!