El grupo europeo MBDA, especialista en misiles y municiones guiadas, desveló su hoja de ruta para el programa SCAF en el Salón Aeronáutico de París 2019. Esto se basa en programas existentes, otros y desarrollo, en línea con los cambios en la realidad del campo de batalla por venir.
En primer lugar, el grupo seguirá desarrollando el misil europeo METEOR, presentado hoy como “el mejor del mundo”, y que evolucionará para mantener esta ventaja a lo largo de los años. Para la penetración de espacios con denegación de acceso, MBDA hace hincapié en los misiles de crucero, diseñados para esta misión, y en la apertura de espacios que permitan al poder aéreo aliado desarrollar su poder. Naturalmente, pensamos en el programa FMC/FMAN para futuros misiles de crucero/futuros misiles antibuque, en desarrollo conjunto entre Francia y Gran Bretaña, para sustituir los misiles SCALP/Storm Shadow y los misiles Exocet/Harpoon.
Para el tratamiento de objetivos tácticos, el grupo pretende desarrollar sistemas de enfrentamiento (disparados desde una distancia segura), precisos y capaces de comunicarse y actuar concertadamente, en forma de enjambre, para superar los sistemas de defensa por saturación. También en este caso esta descripción recuerda al SMARTGLIDER desarrollado por el industrial. Este tipo de armamento será implementado en particular por los Remote Carriers del programa SCAF, drones de combate que actúan como multiplicadores de potencia disponibles para los aviones pilotados, ya sea para adquirir información, realizar ataques o bloquear los sensores enemigos, sin exponer a los conductores.
Por último, y de forma más inesperada, MBDA menciona los sistemas Hard-Kill, cuyo objetivo será la protección definitiva de los aviones contra los misiles, cuando los señuelos y sistemas de interferencia no hayan conseguido conjurar la amenaza. No se dan detalles sobre este sistema. Estados Unidos está desarrollando un sistema con funcionalidad comparable utilizando un láser de alta energía: el proyecto SHIELD.
Es interesante observar que todos los sistemas deberán equipar no sólo al SCAF, sino también al Rafale et Typhoon, que tendrá que “mantener la línea” hasta 2040. Por ello, el desarrollo de la solución “Remote Carrier” aguas arriba del NGF (New Generation Fighter), para mantener las capacidades de ataque y supresión de las defensas de las fuerzas aéreas europeas, parece ser una necesidad.