El Tribunal Supremo indio ha emitido una nueva sentencia en forma de desaire al Partido del Congreso de Rahul Gandhi y al pequeño grupo de activistas que pretenden socavar el programa. Rafale Indio siendo entregado, al amparo deacusaciones de favoritismo y corrupción. Ya en diciembre de 2018, el tribunal de referencia del sistema judicial indio había rechazado las acusaciones relativas a la marcha del procedimiento privado entre París y Nueva Delhi, considerando que todos los tribunales e instituciones que debían ser consultados habían sido consultados y que el procedimiento había sido sido respetado escrupulosamente.
Esta vez el Veredicto de la Corte Suprema se refería al contenido del propio programa. Una vez más, reiteró que no era competente para evaluar la validez de las opiniones individuales de cada persona, sino sólo para verificar el cumplimiento de la legislación india y de los procedimientos que rigen este programa, que fueron todos respetados. Pero esta vez añadió que las acusaciones que se habían hecho se debían mucho más a un deseo de existencia política y mediática por parte de los protagonistas, que a un caso judicial fundamentado.
Las acusaciones de corrupción y fraude fueron formuladas por el Partido del Congreso en vísperas de las elecciones legislativas de la primavera de 2019, con la esperanza de provocar un rechazo popular a la política seguida por el primer ministro Narenda Modi, candidato a su propia sucesión. Pero los votantes demostraron que estos retrasos políticos y mediáticos tuvieron poca influencia sobre ellos, ya que el partido nacionalista BJP, que preside dentro de la alianza NDA, obtuvo una mayoría absoluta en estas elecciones, dando una legitimidad popular y política muy importante al Primer Ministro.
Esta vez, el gobierno indio fue más allá al explotar esta decisión judicial, acusando abiertamente a sus acusadores de estar manipulados por fabricantes de aviones que compiten con Dassault Aviation, a pesar de que los primeros aviones Rafale destinados a la Fuerza Aérea India han sido transmitidos oficialmente a las fuerzas indias y que, según numerosas fuentes que lo corroboran, el Presidente Modi podría anunciar un nuevo pedido con motivo de la visita del presidente Macron a Nueva Delhi a finales de enero de 2020 con motivo del Día Nacional de la India.
Este nuevo orden, que esta vez podría basarse en una cláusula de “fabricación en India”, podría efectivamente poner fin a la situación. Rafale en una posición de fuerza en la competencia MMRCA-2 que cubre 114 aviones, entre los que el avión francés se opone al F16 Viper, al Jas 39 Gripen, al Mig35, al F18 Super Hornet y al Typhoon, así como para el concurso relativo a 57 aviones de combate embarcados en el que se opone a este mismo F18 E/F Super Hornet.
En efecto, disponer de una infraestructura de montaje local, con red de subcontratación propia, así como de un avión ya adaptado a las necesidades de las fuerzas aéreas y navales indias, en particular en lo que respecta al uso de municiones y protocolos de comunicación y enlace de datos, y que dispone de un sistema de mantenimiento infraestructura para garantizar que 150 Rafale, permite reducir significativamente sus costes contractuales y, por tanto, dar al consorcio Rafale un activo importante a destacar en estas dos competiciones. Por tanto, no hay duda de que Boeing (F18 E/F), Lockheed-Martin (F16), Eurofighter (Typhoon) o Saab (Jas 39) tienen interés en empañar la imagen de Dassault y del dispositivo ante la opinión pública india.
También podemos preguntarnos sobre la posible implicación de HAL, el fabricante de aviones indio que ensambla el Su-30MKI y produce el Tejas, con quien las relaciones fueron difíciles para Dassault durante las negociaciones en torno al contrato MMRCA, que fue la principal causa de la cancelación del último, lo que lleva al orden de 36 dispositivos sin receta. Sin embargo, esta decisión judicial ciertamente no marcará el fin de la implacabilidad de los partidarios de las teorías de corrupción que rodean el programa. Rafale. Es probable que estos últimos utilicen otros medios para intentar hacer valer "sus posiciones", al menos mientras la Rafale seguirá representando un competidor importante para los contratos de equipos de defensa de la India, o si estos contratos realmente se adjudican.