De acuerdo con el sitio de noticias ruso Izvestia, las autoridades militares del país habrían ordenado que las fuerzas rusas pongan en servicio un sistema de defensa aérea y antimisiles totalmente automatizado basado en el sistema "Pantsir". Este "Pantsir autónomo" tendrá una sección táctica totalmente automatizada, controlada por el escalón táctico a través de un enlace de datos seguro. Como tal, Sistemas Pantsir, como TOR, Buk, S300/350/400 están todos interconectados en las fuerzas rusas e intercambian de forma nativa sus datos de detección y enfrentamiento, así como los procedentes de aviones de alerta aérea como el Beriev A50, para garantizar una defensa antiaérea y una eficacia multicapa. antiproyectil.
Al eliminar el factor humano, los ingenieros rusos quieren “eliminar un riesgo”, tanto para el personal como para la gestión de la misión. De hecho, consideran que las tecnologías actualmente en servicio, como las municiones en racimo, y las que están en desarrollo, como las enjambres de drones, representará un nivel de riesgo muy alto para las fuerzas y sistemas responsables de protegerlos, que serán atacados de manera prioritaria. Además, elimina las limitaciones humanas, ya sea en términos de temperatura, ambiente contaminado o resistencia a la fatiga. Finalmente, se reducirán los tiempos de reacción entre la detección, la identificación y el enfrentamiento/destrucción del objetivo.
En la presentación del sistema que hace Izvestia queda claro que el propio sistema determina los objetivos a atacary el orden de enfrentamiento. El control humano se limita a determinar las “reglas de enfrentamiento”, como un sector, códigos de identificación, etc. Desgraciadamente, este método, ya aplicado en particular a nivel del sistema americano Aegis, mostró sus límites cuando el sistema confundió a un Airbus iraní. por un misil en 1988, que mató a 290 personas, entre ellas 66 niños.
Por el momento, sólo se han realizado estudios preliminares y las autoridades rusas no han anunciado ninguna fecha de entrada en servicio. La decisión de proceder así se tomó tras comprobar la multiplicación de las amenazas que los sistemas de escolta antiaéreos deben afrontar actualmente, en particular en Siria, donde la base aérea de Khmeimim y el puerto de Tartous, donde están desplegadas las fuerzas rusas, tienen en varios En ocasiones ha sido objeto de ataques de saturación con drones y cohetes. Sólo durante los dos primeros años de compromiso, el Pantsir ruso desplegado en Siria habría derribado 54 cohetes y 16 drones, en particular durante dos ataques masivos simultáneos contra las instalaciones de Khmeimim.
Tenga en cuenta, sin embargo, que varias fuentes indicaron en 2018 que Los Pantsir habían encontrado importantes dificultades en Siria., en particular para detectar drones enemigos. Asimismo, las cifras expuestas en el artículo ruso sobre la destrucción de 71 de los 103 misiles de crucero lanzados contra instalaciones químicas sirias en abril de 2018 son muy cuestionables, por un lado por el desmentido de las autoridades militares francesas y británicas y por el otro. Americanos para quienes “ todos los misiles habrían alcanzado sus objetivos“, y por la observación de la destrucción real de los objetivos después de los ataques en las fotografías de satélite publicadas después de los ataques. Rusia también anunció el desarrollo de una nueva versión del Pantsir con mayor rendimiento, el Pantsir-SM.